EUA.- Una de las últimas actividades del presidente Donald Trump antes de dejar la Casa Blanca será visitar el polémico muro fronterizo que construye en los límites con México, una de las principales promesas de campaña que impulsó su llegada al poder hace 4 años.
Se prevé que sea este martes 12 de enero cuando haga una visita al Valle del Río Grande en Texas, donde hace una semana se finalizaron 724 kilómetros del nuevo muro fronterizo.
El Departamento de Seguridad Nacional promocionó ampliamente la construcción “histórica” del nuevo muro, mientras se trabaja a marchas forzadas para concluir otros 14 kilómetros antes de la toma de posesión de Joe Biden como nuevo presidente de los Estados Unidos de América.
Mark Morgan, comisionado interino de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP por sus siglas en inglés), expresó que el objetivo es otorgar nuevos contratos antes del 19 de enero para la edificación de otros 482 kilómetros de valla.
Pero es precisamente esta expedita asignación de contratos la que ha provocado una lenta construcción del muro al sur de Texas porque se otorgan sin haber adquirido los títulos de propiedad correspondientes.
De los 177 km que se planeaban levantar solo se han logrado 24 hasta mediados de diciembre.
Respecto a la visita, el opositor demócrata Henry Cuellar sentenció que Trump tiene problemas mucho más importantes que venir y ver su solución del siglo XIV llamada ‘muro’.
Sin embargo, reconoció que si inició su campaña atacando a México y construyendo el muro seguramente “quiere terminar su mandato de la misma manera”.
