Como cada 12 de diciembre, millones de fieles llegaron hasta la Basílica de Nuestra Señora de Guadalupe en la Ciudad de México, la patrona de América Latina, tras varios días de peregrinación desde distintos puntos del país.
Hombres, mujeres y niños –muchos con retratos de la virgen– llegaron hasta el recinto situado en el norte de Ciudad de México, a menudo cumpliendo promesas para pedir o agradecer algo a la virgen.
En Chihuahua desde el fin de semana miles de fieles católicos llegaron al santuario de Guadalupe.
Este día es de fiesta nacional, incluso los bancos no abren y en muchos trabajos les dieron el día a sus empleados.
En 1531 la virgen de tez morena se le apareció al indígena Juan Diego y su imagen quedó impresa en el manto del hombre, que está exhibido dentro de la iglesia. Juan Diego fue canonizado en 2002.
Las multitudes alrededor del templo son tan grandes que algunas personas duermen en la desde la noche anterior en la acera de enfrente, a fin de tener oportunidad de entrar y ver la imagen de la Guadalupana.
Santa María de México conserva nuestra fé y salva nuestra Patria.
