MEXICO.- En un extraño arrebato de honorabilidad Andrés Manuel López Obrador recordó que su primera promesa al registrarse en el INE como candidato de la coalición MORENA, PT y PES a la presidencia de la república, aquella tarde del viernes 16 de marzo del 2018, fue realizar una consulta cada dos años sobre su gestión donde aseguró que se sometería a la revocación de mandato si la gente así lo decide.
Y fue por eso, en honor a “la palabra empeñada”, que este lunes presentó su renuncia como presidente de la nación consiente que su nivel de popularidad ha caído drásticamente por debajo del 60% mínimo aprobatorio, esto a pesar de que inexplicablemente los propios partidos de oposición se sabotean a sí mismos dejando al electorado sin opciones para corregir la fallida decisión del 2018 donde confiaron en que la coalición “Juntos haremos historia” sería la “Esperanza de México” pero ya los resultados están demostrando que fue un error.
Lo bueno es que el presidente resultó ser “hombre de palabra” y les “calló la boca” a aquellos detractores que aseguraban que a AMLO solo le interesa mantenerse en el poder, demostrando ser más desprendido incluso que el samaritano exmandatario de Uruguay, José Mujica quien solo gobernó su país durante un sexenio (2010 al 2015) y es puesto como un ejemplo de austeridad y desapego al poder.
Todo esto sería una gran noticia que causaría revuelo internacional y metería en aprietos al bloque de países socialistas “Foro de Sao Paulo” (ahora llamado “Foro de Puebla”) debido a los innumerables apoyos económicos que durante años le brindaron a MORENA para que AMLO llegara al poder y esperaban recuperar con creces esa “inversión”, que en realidad fue el desvío de impuestos pagados por contribuyentes de otros pases para subsidiar el proyecto izquierdista de AMLO, sin embargo toda esa preocupación se “esfumó” al revisar el calendario y darse cuenta que este lunes 28 de diciembre es el “Día de los Santos Inocentes”, así que estimado lector “inocente palomita que te dejaste engañar”.