Sigue avanzando en México la cultura de la muerte.
Las comisiones unidas de Administración y Procuración de Justicia, y la Igualdad de Género del Congreso capitalino aprobaron este lunes con 15 votos a favor y 6 en contra, un dictamen que despenaliza por completo el aborto en la Ciudad de México.
Este dictamen deroga los artículos 144, 145, 147 y 148 del Código Penal que criminalizaban el aborto después de las 12 semanas de gestación, además se elimina el delito de aborto del artículo 76.
Los votos en contra fueron de los panistas Olivia Garza, Lizzet Bernal, Enrique Sánchez Flores y Diego Garrido; además, a título personal, las legisladoras de PVEM Yolanda García y Paula Pérez también votaron en contra.
Antes de comenzar con esta discusión, Diego Garrido pidió que la sesión de comisiones unidas fuera suspendida argumentando diversas irregularidades parlamentarias, como el no haberlos convocado a esta sesión ordinaria con 48 horas de antelación, como marca el reglamento.
Como respuesta, Alberto Martínez Urincho, presidente de la Comisión de Administración y Procuración Justicia, precisó que esta sesión tuvo carácter de urgente aunque se haya convocado a los legisladores a una sesión ordinaria, “es un tema de interpretación que puntualmente lo estamos aclarando”.
En este sentido, la también morenista Elizabeth Mateos precisó que se trató de un “error de dedo”.
Durante el debate, Jannete Guerrero, del PT, afirmó que la despenalización del aborto no es sólo un tema de salud, sino de justicia social y de derechos humanos para que las personas gestantes puedan tomar decisiones seguras y dignas sobre su vida reproductiva, y subrayó que despenalizar es no castigar; mientras que legalizar es permitir y regular, “lo que nosotros estamos haciendo es despenalizar, no confundamos”.
En este sentido, la panista América Rangel detalló que al derogar los artículos 144 y 145 del Código Penal local se elimina el límite para abortar hasta las 12 semanas de gestación, lo que implica que ahora se podría abortar en cualquier etapa del embarazo, “incluso un minuto antes de parto, matando a un ser humano indefenso completamente formado y preparado para vivir”.
Valentina Batres, de Morena, argumentó que la criminalización del aborto ha sido una herramienta de «opresión» utilizada para controlar y someter los cuerpos de las mujeres y personas gestantes, y recordó que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) dejó claro que criminalizar a quienes buscan un aborto es incompatible con los derechos humanos y la justicia, “hoy como legisladoras y legisladores tenemos el deber de asegurar que este derecho no sea letra muerta, sino una realidad”.
Asimismo, recalcó que no hay permiso para quitarle la vida a nadie, pero sí para suspender un embarazo en un contrasentido.
La panista Olivia Garza apuntó que el niño no nacido tiene derecho a la vida, “por lo que si hablamos que vamos a interrumpir el embarazo o el parto cerca del nacimiento, es un niño que ya tiene vida propia, lo estaríamos asesinando”.
Se estima que en la ciudad de México han sido asesinados en el interior del vientre de sus madres, más de 100 mil seres humanos indefensos, muchos bajo el argumento de ser productos de violación, pero muchos más sin un motivo aparente que justifique tal decisión.
Con información de El Universal y agencias.