MÉXICO.- El viejo capo consideró que por derecho de antigüedad podía volver al “negocio” sin pedir permiso, ni pagar derecho de piso, a sus antiguos subordinados en el Cártel de Guadalajara
Rafael “Caro” Quintero formó en 2018 el Cártel de Caborca y desde ahí declaró la guerra contra el Cártel de Sinaloa y los hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán, herederos de la organización delictiva junto a Ismael “El Mayo” Zambada, quienes le habrían prohibido volver “al negocio”.
El viejo líder criminal, llamado el “Narco de narcos” trató así de retomar su papel como un importante capo y comenzó la batalla por el control de Sonora frente a “Los Salazar”, brazo armado en esa entidad del Cártel de Sinaloa.
Reportes indican que Rafael Caro Quintero, una vez liberado, llegó a tener reuniones con Joaquín “El Chapo” Guzmán, quien de forma “amistosa” le recomendó no tratar de volver, porque el liderazgo ya no le correspondía, mientras que “El Mayo” Zambada le ofreció protección en un pueblo serrano alejado para vivir tranquilamente el retiro.
Sin embargo, el viejo capo consideró que por derecho de antigüedad podía regresar al mundo criminal sin pedir permiso ni pagar derecho de piso a quienes antes fueron sus subordinados en el extinto Cártel de Guadalajara
