MÉXICO.- Desde la antigüedad, las hierbas medicinales han sido utilizadas por los pueblos indígenas en todo México y han surgido diversas iniciativas para promover el conocimiento de las plantas de uso medicinal, así como diversas investigaciones sobre los usos de estas plantas para el tratamiento preventivo, integral y curativo de muchas enfermedades.
El jengibre es una planta que tiene propiedades medicinales, y también se utiliza como condimento que se consume fresco, seco y en polvo, así como en jugo o aceite.
JENGIBRE (ZINGIBER OFFICINALE)
Es un ingrediente estelar de la gastronomía asiática y uno de los más utilizados en la hierba ancestral de ese continente. Es una raíz con un sabor muy fuerte que se puede cultivar con relativa facilidad en los huertos familiares.
La forma más habitual de tomarlo como coadyuvante en cualquier tratamiento para aliviar el tracto respiratorio es en infusión, ya que posee propiedades expectorantes y antiinflamatorias. Su consumo en nuestra dieta diaria beneficia al sistema inmunológico. También se puede comer crudo en rodajas finas o curado con azúcar.
En climas fríos, se recomienda consumir té de jengibre con un toque de canela y limón, ingredientes que combinan a la perfección, logrando un sabor ligeramente picante con un delicioso aroma, pero que ayudan a combatir el resfriado y sus síntomas.
Por si esto fuera poco, te presentamos otras ventajas de esta raíz para que puedas aprovecharla a tu favor.
Jengibre.
- Activa los jugos digestivos, mejorando así la absorción y asimilación de los nutrientes esenciales en el organismo.
- Reduce las náuseas.
- Evite los calambres.
- Mejora el flujo sanguíneo y reduce las hemicránea.
- Lucha contra el envejecimiento prematuro y reduce los niveles de estrés.
- La única contraindicación que genera su consumo es el aumento de la temperatura corporal, por lo que no se recomienda para pacientes con fiebre.
En 2018, la producción de jengibre en México representó casi 4 mil toneladas, concentrada principalmente en Puebla.
