Delicias.- La ironía de la vida marcó a esta ciudad. Mientras un niño de la etnia tarahumara falleció en el Hospital Regional con un cuadro probable de Covid-19, en una caseta de taxis nació otro que se encuentra estable y saludable.
Fue en el Hospital Regional, donde llegaron ambos casos de familias tarahumaras, uno anunciando el dolor de la muerte y el otro el milagro de la vida.
El personal del nosocomio dio a conocer que el fallecimiento del niño ocurrió la noche del lunes, poco después de haber sido internado con un cuadro clínico similar al SARS-COV-2.
El infante fue atendido en el área de urgencias, sin embargo falleció como un caso probable del virus, de acuerdo a lo que el personal comunicó.
Más de 15 horas después, antes de las 5 de la tarde, se reportó al número de emergencia 911, una mujer en proceso de parto en una caseta de taxis que se ubica en la avenida 11 y calle 15 oriente en el fraccionamiento Paseo Las Vírgenes.
De acuerdo a la información, una familia procedente de Naica, de la etnia tarahumara llegó para pedir apoyo al sitio abordo de una camioneta de la marca Ford, línea Expediton color verde modelo 2000.
Una mujer rompió la fuente, arrojó producto y está fue apoyada por paramédicos de Cruz Roja de la delegación de Cruz Roja.
La madre dio a luz a un niño, fue estabilizado, ambos fueron atendidos y trasladados al hospital para su valoración médica. Hasta el cierre de la edición se dijo que estaban estables.
